Las frutas y verduras son los alimentos básicos de todo tipo de dieta y es precisamente por ello que es importante conocer los métodos adecuados para su óptima conservación.
Para aprovechar al máximo las propiedades beneficiosas de los productos hortofrutícolas, es recomendable respetar ciertas normas de conservación y consumo, preferir siempre las frutas y hortalizas de temporada y adquirirlas exclusivamente a minoristas garantizados y seguros.
En este sentido, en los siguientes párrafos explicaremos cómo tratar las frutas y verduras, cuánto duran las verduras cocidas, si hay que guardarlas en el frigorífico y a qué temperatura se deben conservar las frutas y verduras.
Una guía específica sobre cómo almacenar frutas y verduras para evitar la descomposición prematura y minimizar el desperdicio.
Contenido
Conservar frutas y verduras: ¿mejor en la nevera o a temperatura ambiente?
No hay una respuesta única a esta pregunta: para la conservación de frutas y verduras es necesario hacer algunas diversificaciones.
Si te estás preguntando dónde poner fruta en la cocina, es necesario señalar que no todas las frutas y verduras van en la nevera y no todas se pueden conservar a temperatura ambiente.
En general, la fruta que no está completamente madura se puede almacenar a temperatura ambiente durante el invierno. En cuanto a las verduras, las que se pueden conservar a temperatura ambiente son los tomates, las judías verdes, los pepinos y los calabacines.
En particular, para conservar las verduras fuera de la nevera, es recomendable colocarlas en un lugar fresco y seco, preferiblemente en la oscuridad, lejos de la humedad y fuentes de calor.
Tenga cuidado de no superar los 15-20 ºC y de no exponerlos a cambios bruscos de temperatura.
Entre el resto de verduras que se pueden guardar fuera de la nevera tenemos calabaza entera, patatas, tanto tradicionales como dulces, colinabo y nabo. El ajo y la cebolla se pueden colocar en una bolsa de papel previamente perforada.
Estas verduras, si se conservan adecuadamente, crudas, pueden durar hasta un mes aunque siempre es recomendable consumirlas a las pocas semanas.
Y en cambio, ¿cuánto duran las verduras cocidas? Las verduras sobrantes ya cortadas y cocidas deben colocarse en recipientes especiales, colocarse en el frigorífico y consumirse en pocos días, 1-2 días como máximo.
Cómo almacenar frutas y verduras en el refrigerador
Para conservar las verduras en la nevera, es importante ponerlas en el cajón de la parte inferior de la nevera. De hecho, el cajón para frutas y verduras está diseñado para conservar mejor este tipo de alimentos.
Consigue mantener una temperatura tal que conserve el aspecto exterior y las propiedades nutritivas de cada verdura que se coloque en su interior.
La fruta debe colocarse en la nevera cuando esté madura, se puede lavar previamente antes de guardarla y, en el caso de frutas pequeñas, como arándanos, fresas o bayas, colocar en recipientes pequeños.
También es recomendable poner todas las frutas y verduras en bolsas de papel (entendidas como las de pan) o envolverlas en papel absorbente. Para conservar la frescura y evitar la contaminación, sería una buena regla separar la fruta de las verduras.
¿Qué fruta se puede almacenar en el refrigerador?
A continuación se muestra una lista de las diferentes frutas que se pueden conservar en la nevera:
- Los caquis son frutas muy delicadas que pueden durar hasta 3 días. Para no dañarlos, es importante mantenerlos dentro de su empaque o en un recipiente con cierre hermético;
- Si se guardan en el refrigerador, los kiwis pueden durar hasta una semana;
- Las manzanas y las peras, según su grado de madurez, se pueden conservar en el frigorífico unos 10 días. Atención: las manzanas y las peras pueden acelerar el proceso de maduración de otras frutas, por lo que es importante mantenerlas separadas;
- Los cítricos, es decir, naranjas, limones, pomelos y mandarinas, se pueden conservar en el frigorífico durante unas 2 semanas. Sin embargo, la temperatura nunca debe descender por debajo de los 5 ° C porque, a bajas temperaturas, pueden desarrollar un sabor amargo y agrio;
- Las frutas rojas, exóticas o de verano se pueden conservar un máximo de 3-4 días.
¿Qué verduras se pueden guardar en el frigorífico?
A continuación se muestra una lista de las diferentes verduras que se pueden conservar en la nevera:
- Las ensaladas y las verduras de hoja son verduras bastante delicadas que se pueden conservar en el frigorífico durante al menos 3 días;
- Los champiñones frescos se pueden guardar en el refrigerador durante 5 a 6 días;
- Una vez comprados, los espárragos se consumen mejor en unas pocas horas. Son hortalizas muy delicadas que tienden a deteriorarse bastante rápido;
- Las zanahorias, tanto en el refrigerador como afuera, pueden durar al menos 2 semanas sin dañarse;
- Las berenjenas, los pepinos, el hinojo y los calabacines pueden durar hasta una semana, máximo 10 días en el frigorífico.
Todas las verduras, si se conservan en la nevera, deben envolverse en papel absorbente o colocarse en bolsas de papel.
Adoptando este pequeño truco será posible conservar la frescura de la verdura y minimizar la humedad, principal causante del deterioro.
Algunos consejos para almacenar las verduras y evitar el desperdicio
Como hemos visto, las frutas y verduras son alimentos bastante delicados con un tiempo de conservación bastante variable.
Para evitar el desperdicio innecesario de alimentos, le recomendamos que los compre en cantidades más bien pequeñas, para evaluar cuidadosamente sus necesidades y las de su familia y prestar mucha atención a su conservación.
La fruta y verdura recién comprada debe lavarse siempre con cuidado y conservarse correctamente, comprar siempre fruta y verdura de temporada y sobre todo confiar en revendedores seguros y garantizados.
Las verduras se pueden utilizar para preparar numerosos platos, aperitivos, primeros platos, segundos platos, quiches y guarniciones. Es un alimento muy versátil que, además de ser fundamental para el bienestar del organismo, es fácil de preparar y excelente para congelar.
Si tienes muchas verduras frescas y no sabes qué hacer con ellas, puedes preparar una buena sopa para guardar, en bolsas en porciones, en el congelador.
Los aterciopelados y las sopas son otra forma alternativa de consumir verduras en invierno. Juega con los sabores y prepara un delicioso risotto con vegetales mixtos y queso. Las tortillas, los wraps y los flanes son ideales para hacer que las verduras sean más apetecibles y sabrosas.
Algunas verduras, como tomates, calabacines y berenjenas, son perfectas para hacerlas en aceite, para conservarlas en tarros de cristal durante un par de meses.
Si tienes mucha fruta madura, utilízala para preparar mermeladas y conservas, para postres y tartas.