Similares, pero muy diferentes. He aquí lo que diferencia a estos dos quesos cremosos. Suave por fuera y blanda por dentro, la mozzarella es sin duda el queso más popular de Italia. Con una historia milenaria en la región de Campania, es apreciado en todo el mundo, al igual que la burrata. He aqí las diferencias entre ambos.
Dos tipos de queso
Ambos son quesos frescos de leche de vaca elaborados con el método de la pasta filata (cuajada estirada). Pero mientras la mozzarella, también conocida como fior di latte, se produce en Campania desde el siglo XII, la burrata se elaboró por primera vez en Andria (Apulia), inventada por Lorenzo Bianchino en 1956. Una fuerte nevada dificultó el transporte de los productos lácteos, así que el quesero decidió utilizar la cuajada estirada de la mozzarella como envoltorio para guardar la nata. Así nació la burrata.
Mozzarella frente a burrata
La mozzarella se produce a partir de la cuajada, que se obtiene añadiendo fermentos lácticos y cuajo a la leche de vaca pasteurizada. A continuación, se corta la cuajada y se extrae el suero. En este punto, la cuajada se corta en tiras y se amasa en agua hirviendo, manual o mecánicamente, para hacerla «girar» o «estirar», transformándola así en trozos de mozzarella. La última fase consiste en enfriar los trozos en agua.
La burrata también se elabora con la cuajada estirada de la mozzarella, pero en este caso no es la sustancia principal del producto lácteo, sino que sirve de envoltorio. En su interior, hay un relleno suave y cremoso: stracciatella, pasta filata deshilachada mezclada con nata. Mientras que la mozzarella tiene un sabor más delicado y una textura más elástica, la burrata es más suave y sabrosa, pero también, debido a la nata, más calórica.